martes, 3 de enero de 2012

10-La Bahía

SANTA CRUZ, ISLAS GALÁPAGOS, ECUADOR

Aquella noche conocí en el hotel a Sofía, la chica de www.viajeros.com que me había recomendado el hotel Los Amigos. Había llegado el domingo con su novio, y luego de pasar el lunes en Santa Cruz,  iban a instalarse en Isabela por la mañana siguiente. Estaban comiendo unos tallarines riquísimos, y como no los terminaron me dejaron lo que quedó en la heladera para mi almuerzo del día siguiente.

Estaba ya acostado cuando descubrí que la tarjeta de memoria de mi cámara de fotos se había trabado y no había manera de cerrar el compartimento donde entraba, ni de guardar las fotos que sacaba. No sabía a quien pedir ayuda, y cuando escuché una puerta abrirse salí así en calzoncillos como estaba, y le pedí al novio de Sofía, que volvía del baño, que me ayudase, pero él tampoco pudo.


Por la mañana, el hijo de Mary intentó solucionarlo, y tampoco. Me indicaron entonces donde había un negocio que arreglaba este tipo de desperfectos. El problema era que a aquellas horas de la mañana todo estaba cerrado. Fue Karina, quien como siempre, solucionó el problema. Me ofreció una cámara muy barata que había comprado ahí mismo en Puerto Ayora para solucionar la emergencia, y cuando el negocio abriera ella llevaría mi cámara a arreglar mientras yo tomaba fotos tranquilo con la suya en mi tour de la bahía.








El “tour de la bahía”, es un paseo que me costó unos 30 dólares y que incluye Lobería-Tintoreras-Canal del amor-Las Grietas. Este tour se hace por la mañana y es conveniente sobre todo para los que van a Galápagos por pocos días, ya que no exige de mucho tiempo y permite tener un panorama de los alrededores de Santa Cruz. Lo primero que visitamos fue la lobería. Un islote repleto de lobos marinos donde en cuya orilla nos detuvimos para realizar snorkel. Demás está decir que los peces eran gigantes y de una variedad de colores como jamás había visto. Mi primer snorkel había sido en Ilha Grande (Brasil), hacía un año, y este lo superaba con creces. El agua, además, al ser tan transparente, permitía apreciarlos en todo su esplendor.
Los lobos marinos, protagonistas absolutos de la situación, nadaban entre nosotros y jugaban entre ellos. Cada tanto, alguno se atrevía a acercarse a nuestras caras como si nos fuese a comer, pero el guía ya había explicado que es su modo de jugar con los humanos.

Después de unos 20 minutos en Lobería regresamos hacia el oeste y nos internamos por el Canal del amor, un pequeño canal de aguas turquesas rodeado por acantilados. Allí ascendimos por unas escaleras e hicimos una caminata en la que observamos multitudes de iguanas y muy debajo nuestro, en una especie de bahía, las tintoreras, que lejos de lo que pueda creerse, no son señoras japoneses dedicadas a teñir o limpiar prendas de vestir, sino unos tiburones de punta blanca como los que habían estado nadando a mi alrededor la tarde anterior. Esta vez no me impresionaron demasiado, ya que estaban a varios metros de distancia mientras los veíamos desde un mirador, y eran solamente cuatro.
El último punto del paseo fueron Las Grietas, y para llegar allá debimos caminar unos 15 minutos sobre unas rocas, atravesando unos inmensos cactus y bordeando una laguna amarilla que me recordaba a aquellas del altiplano boliviano que había conocido hacía un tiempo (http://viajaresmidestino.blogspot.com.ar/2012/04/lagunas-y-desiertos-desierto-siloli.html).

Cuando llegamos, muertos de calor, nos encontramos con dos enormes paredes de roca a través de las cuales corría un canal de agua cristalina. Esta agua, según supe después, son las que se utilizan como agua corriente en Puerto Ayora y están conformadas por agua dulce que llega desde arriba filtrándose por las grietas, y agua salada que se introduce desde el mar.
Lo cierto es que algunos ya estábamos cansados, el agua era helada, hacía mucho calor, y en este último punto del tour el paseo era breve, por lo cual no teníamos ganas de quitarnos toda la ropa y meternos a un agua helada para irnos a los cinco minutos. Aprovechamos entonces para descansar en la sombra, sentados en las grietas, mientras otros se daban un chapuzón.
La vuelta fue complicada y demoramos más de lo previsto, porque una señora brasilera, a quien se le había ocurrido hacer el tour en ojotas, se lastimó los pies con las rocas y tuvo que hacer el camino de regreso tomada del brazo por el guía, ya que se lastimaba a cada paso e iba dejando gotas de sangre en cada roca que pisaba.




Luego del tour de la bahía me fui al hotel donde almorcé los fideos que me habían regalado Sofía y su novio el día anterior. Karina me había dejado una nota en la habitación diciéndome que se había ido a almorzar con Adriana y me esperaba en la playita de la estación.
Allá fui, y me costó encontrarlas, porque ya habían terminado de almorzar y no me acordaba cual de los senderos llevaba hasta la playa. Lo interesante fue que en mi búsqueda fui a parar a las cabañas donde residen los voluntarios y chusmear un poco cómo viven estos jóvenes selectos que vienen de todo el mundo a trabajar y adquirir en este rincón del globo una experiencia singular para sus profesiones.
Cuando por fin encontré a Karina, me di un chapuzón en la playa donde no había casi nadie, y para mi sorpresa una raya dorada nadaba solitaria muy cerca mío sin inmutarse ante mi presencia.

Fuimos después a la estación científica donde Adriana y otros voluntarios analizaban en unos microscopios unas larvas que aun no habían sido identificadas y nos mostraron parte del trabajo que allí realizan.
Después nos volvimos al hotel, donde nos sumamos a un paseo que íbamos a hacer en el bote de un amigo del hijo de Mary, la dueña del hotel. A este paseo la habían invitado a Karina, y yo me invité solo en un acto de caradurez, ya que pensaban pasar por la playa de los alemanes adonde todavía no había ido.






El bote no apareció, entonces junto al chico del hotel, y dos amigos suyos nos fuimos a las grietas, donde había estado por la mañana. Pero esta vez pude disfrutarlas a pleno. Atravesé a nado todo el canal, donde casi no hay peces para ver, pero cuyo fondo impresiona, ya que se ve todo blanco y grisáceo, y por momentos hay que sumergirse por debajo de unas rocas para llegar hasta el final del túnel.







Por la playa de los alemanes pasamos en el camino de regreso al atardecer, después de tomar unas cervezas. En mi ya rutinaria vuelta por el centro charlé un rato con Franklin, quien estaba indignado porque le habían robado dinero del hotel donde se hospedaba y andaba buscando trasladarse a otro.











Esa noche me dormí temprano. Las chicas habían sido invitadas a cenar una parrillada en el hotel, y ya me parecía un abuso invitarme también por mi cuenta. Me puse a hacer los cálculos de mis gastos y a planear un poco las actividades para los dos días que me quedaban. Con el sueño, olvidé pedirle a Karina mi cámara de fotos. Ya la había llevado a arreglar y por suerte el problema que tenía era tan sencillo que no me cobraron absolutamente nada. 





















No hay comentarios:

Etiquetas

Altiplano Boliviano (3) Año nuevo (4) Arequipa (3) Arica (2) Baños (1) Bariloche (2) Belo Horizonte (2) Cabanaconde (1) Canoa (1) Cañón del Colca (1) Cataratas del Iguazú (1) Chile Chico (1) Chiloé (1) Chinchero (1) Chivay (1) Colonia (1) Congonhas (1) Copacabana (2) Cotacachi (2) Cotopaxi (1) Coyhaique (3) Cuenca (4) Curitiba (1) Cuzco (7) El Bolsón (1) El Calafate (4) El Chaltén (5) El Cisne (1) Encarnación (1) Esquel (2) Floreana (1) Florianópolis (1) Frutillar (1) Futaleufú (2) Géiseres del Tatio (1) Guayaquil (2) Humahuaca (2) Ibarra (1) Ilha Grande (2) Ingapirca (1) Iquique (6) Isabela (1) Isla del Sol (1) Islas de los Uros (1) Islas Galápagos (9) Jesús de Tavarangué (1) La Paz (4) La Quiaca (1) La Tirana (1) Latacunga (1) Loja (2) Los Antiguos (2) Maca (1) Machu Picchu (5) Maras y Moray (1) Mariana (1) Matilla (1) Misahualli (1) Misiones (1) Mitad del Mundo (1) Mollendo (1) Montañita (3) Montevideo (1) Niterói (1) Ollantaytambo (1) Otavalo (1) Ouro Preto (3) Paraty (1) Petrohué (1) Pica (1) Písac (1) Porto Alegre (1) Posadas (1) Potosí (2) Puerto Ayora (4) Puerto Guadal (1) Puerto Iguazú (3) Puerto López (2) Puerto Montt (2) Puerto Natales (2) Puerto Río Tranquilo (2) Puerto Varas (1) Puno (3) Punta Arenas (2) Purmamarca (4) Puyehue (1) Quilotoa (1) Quiroga (1) Quito (5) Río de Janeiro (4) Salinas Grandes (1) Salta (3) San Ignacio (3) San Martín de los Andes (1) San Pablo (1) San Pedro de Atacama (4) Santa Cruz (7) Sillustani (1) Sucre (1) Tacna (3) Tena (2) Tilcara (2) Tiwanaku (1) Torres del Paine (1) Trinidad (1) Tupiza (1) Turi (1) Ushuaia (8) Uyuni (3) Vilcabamba (3) Villa La Angostura (1) Villazón (1) Yanque (1)

Visitantes del mundo